El Dr. Alfredo Yaluk, jefe de Ginecología y Obstetricia del Hospital Nacional de Itauguá, explicó cómo se manifiestan los embarazos psicológicos en el cuerpo. Primero afirmó que sí existe el embarazo psicológico, destacando que el cerebro y el pensamiento humano son tan complejos que pueden desencadenar situaciones que parecen irracionales.

Aunque no es frecuente, señaló que en el hospital han tenido varios casos a lo largo de los años. Por ejemplo, un factor disparador podría ser la pérdida de un embarazo previo o una ansiedad extrema por ser madre. En algunos casos, una paciente con un pequeño retraso menstrual podría convencerse de que está embarazada.

La paciente que se autodetermina embarazada, desarrolla todos los síntomas físicos y psicológicos de un embarazo, como mareos, náuseas, y cambios físicos, incluyendo el aumento de tamaño de los senos y el abdomen.

El Dr. Yaluk añadió que, en algunos casos, las pacientes incluso sienten que la criatura se mueve o patea y acuden al control médico refiriéndose a estos síntomas. En los embarazos reales, especialmente en el tercer o cuarto mes, la única forma de confirmar que hay un embarazo es mediante la ecografía, al ver el latido del feto.

“Cualquier otro método, como encontrar senos grandes con secreción láctea o un abdomen grande, no te hace un diagnóstico de embarazo. Incluso un test de embarazo positivo no garantiza que haya una gestación, ya que un resultado positivo también puede presentarse en casos de tumores ováricos”.

Finalmente, insistió que la única forma de estar 100 % seguros de que existe un embarazo es mediante ecografía, a partir de las 6 a 7 semanas de gestación. Antes de ese tiempo, solo los métodos de laboratorio o químicos pueden ayudar a confirmar la gestación, pero es la ecografía la que certifica presencia de latido fetal.

Dr. Alfredo Yaluk