Hoy, 9 de mayo, conmemoramos la vida y legado de Santa Luisa de Marillac, patrona de huérfanos, viudas y de las obras sociales. Nació en 1591 en París, Francia. Luisa demostró desde joven una profunda vocación hacia el servicio a los demás.

A pesar de las dificultades económicas que enfrentó tras la muerte de sus padres, Luisa dedicó su vida a ayudar a los más necesitados. Junto a San Vicente de Paul, fundó la Compañía de las Hijas de la Caridad, destacándose por su entrega incondicional.

Su devoción y compromiso con los desfavorecidos la llevaron a ser canonizada en 1934 y nombrada patrona de los asistentes sociales en 1960.

Su fiesta solía celebrarse el 15 de marzo, pero desde 2016 se conmemora el 9 de mayo, un cambio destinado a evitar celebraciones durante la Cuaresma.