Internacional Juana Rivas hace un gesto de agradecimiento a las puertas de un juzgado de Granada tras quedar en libertad provisional bajo fianza, el 22 de agosto de 2017 en esa ciudad al sur de España© AFP/Archivos Jorge Guerrero
El Tribunal Supremo confirmó este lunes la condena por sustracción de menores contra Juana Rivas, cuya batalla por la custodia de sus hijos fue muy sonada en España, pero rebajó su pena a la mitad, de cinco a dos años y medio de cárcel. El Supremo dio por probado que Rivas viajó en mayo de 2016 a España con sus dos hijos, y no regresó a Italia, donde vivía su pareja, quien tenía la custodia provisional de los menores, según señaló en un comunicado.
“Tras varios requerimientos para que devolviera a sus hijos, el 26 de julio de 2017 la procesada se ocultó con ellos”, y solo los entregó un mes más tarde, recordó la corte.
De allí que fuera condenada por sustracción de menores, pero el Supremo “ha reducido la pena de 5 años a 2 años y 6 meses de prisión al considerar que, aunque fueron dos los menores sustraídos, cometió un único delito y no dos”, como estableció la sentencia en primera instancia.
La nueva pena implica de todas maneras que Rivas debe ingresar en prisión. En España, las condenas a menos de dos años a personas sin antecedentes suelen quedar sin ejecutar.
La pelea por la custodia de los niños entre Rivas y su pareja Francisco Arcuri, a quien la mujer acusó de abusos en el pasado, causó gran revuelo en España, donde la lucha contra la violencia machista es una prioridad del gobierno.
Rivas fue criticada, pero también defendida por personas que destacaban el hecho de que Arcuri fue condenado por violencia doméstica en 2009.
La corte de Granada, que emitió la condena en primera instancia, tuvo en cuenta la condena a Arcuri por golpear a Rivas tras una discusión, pero recordó que la pareja se reconcilió y se mudó a Italia, donde tuvo su segundo hijo.
A mediados de 2016, Rivas presentó otra denuncia en España contra Alcuri, en la que afirmaba que los hijos “han sufrido mucho y presenciado varias cosas”.
No obstante, la corte de Granada indicó que un psicólogo examinó al hijo mayor y no encontró trauma alguno ligado a un posible abuso doméstico.
Por último, destacó también que no hubo evidencia de maltratos después del caso de 2009.