El líder del partido separatista Izquierda Republicana (ERC), Pere Aragonés, fracasó este martes en ser investido como nuevo presidente regional de Cataluña, ante las continuadas divisiones de las formaciones independentistas que controlan la cámara regional.

Con este fiasco, que ya se esperaba, se abre un periodo máximo de dos meses para intentar formar gobierno. De lo contrario, se convocarán automáticamente nuevas elecciones en esta región española de 7,8 millones de habitantes.
En la votación de este martes, en la que necesitaba más síes que noes, Aragonés obtuvo sólo 42 votos a favor, 61 en contra y 32 abstenciones.
Las abstenciones fueron precisamente de los diputados del otro gran partido independentista, Juntos por Cataluña (JXC), que había adelantado que haría descarrilar la investidura para dar más tiempo a negociar las líneas de un nuevo gobierno de coalición con ERC.
Aragonés, vicepresidente del anterior ejecutivo catalán, ya había perdido una primera votación el viernes.
Tres años y medio después del fallido intento de secesión de octubre de 2017, los independentistas retuvieron en las elecciones del 14 de febrero el control de la cámara regional, incluso ampliando su mayoría de 70 a 74 diputados dentro de un total de 135.
Los 9 diputados de la anticapitalista Candidatura de Unidad Popular (CUP), también separatista, se unieron a los 33 de ERC a favor de Aragonés, de 38 años.
Pero un nuevo presidente separatista no será posible sin los votos a favor de JXC, la formación del ex presidente regional Carles Puigdemont prófugo en Bélgica para evadir la justicia española por la fallida secesión.

“Cuestión de voluntad”
Falta “concretar un poco más” el acuerdo de gobierno para “que haya unidad de acción del independentismo”, señaló a la radio pública RNE la portavoz de JXC, Elsa Artadi, quien no obstante confió en que Aragonés será presidente regional más adelante y no habrá necesidad de nuevas elecciones.
“Estoy convencido de que nos pondremos de acuerdo, es cuestión de voluntad, porque compartimos objetivos” y “no se entendería” un fracaso en las negociaciones, declaró este martes Aragonés en la cámara regional.
Aragonés ratificó su compromiso de convencer a “más personas (…) de la necesidad de una república catalana en relación de igualdad con los otros estados de la Unión Europea y del mundo”.
“Se iniciará una nueva ronda de consultas con los representantes de las formaciones para tramitar una nueva propuesta de candidato”, anunció la presidenta del parlamento regional Laura Borrás, al levantar la sesión.
Desde la fallida secesión de 2017, ERC se ha alejado de la posición más confrontativa de JXC, su socio de gobierno desde 2015, y apostó por abandonar la estrategia de ruptura unilateral y promover la negociación con Madrid.
De hecho, ERC facilitó hace un año la reelección del socialista Pedro Sánchez como presidente del gobierno central, a cambio de la creación de una mesa de diálogo bilateral, paralizada por la pandemia.
El independentismo en Cataluña tomó fuerza a partir de 2010. Aun así, la sociedad de la región está profundamente dividida sobre la cuestión.