A través de un mensaje el Papa Francisco agradece la labor del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) en su 30° aniversario, celebrado en un evento solidario en Costa Rica. «La Iglesia camina junto a los pueblos de Centroamérica, que han sabido afrontar las crisis con valentía y ser comunidades que acogen, y los exhorta a perseverar en la solidaridad con confianza mutua y esperanza audaz», escribe el Pontífice.

Ciudad del Vaticano

El Papa Francisco envió un mensaje con ocasión del evento solidario que tiene lugar este 10 de junio, en Costa Rica, para celebrar los 30 años del Sistema de la Integración Centroamericana, constituido el 13 de diciembre de 1991, mediante la suscripción del Protocolo de Tegucigalpa y cuyo propósito es, precisamente, garantizar la integración de Centroamérica y México, con el fin de construirla en una región de paz, libertad, democracia y desarrollo.

En el marco de este evento solidario, en el que además la Santa Sede participa como Observador extra-regional desde el año 2012, el Santo Padre subrayó que la palabra solidaridad, «adquiere un significado aún mayor en esta época de crisis pandémica, una crisis que ha puesto a prueba al mundo entero, tanto a los países pobres como a los ricos».

«La crisis sanitaria, económica y social provocada por el Covid-19 -continuó el Papa- nos recuerda a todos que los seres humanos son como el polvo. Pero polvo valioso a los ojos de Dios, que nos constituyó como una única familia humana».

Asimismo, Francisco hizo hincapié en que, «así como la familia natural educa a la fidelidad, la sinceridad, la cooperación y el respeto, promoviendo la planificación de un mundo habitable incluso en condiciones difíciles», también la familia de las naciones «está llamada a dirigir su atención común a todos, especialmente a los miembros más pequeños y vulnerables, sin ceder a la lógica de la competencia y los intereses particulares».