Para el Economista Jorge Garicoche, la «balanza se inclina a favor de los programas escolares», al tiempo de significar un «incentivo» para que los niños asistan a las escuelas.
No obstante, el economista señaló que es «una decisión difícil de tomar» ya que «los hechos de corrupción hacen que tengamos que pensar en otras ideas».
Un punto importante a tener en cuenta, destacó Garicoche, es que las compras individuales de alimentos son más costosas que las compras que puedan realizar instituciones educativas o las gobernaciones.
JORGE GARICOCHE
