En entrevista con Vatican News, el párroco Alejandro Aravena, relata la conmoción vivida en las últimas horas a causa de la violenta explosión acaecida en el edificio situado en el número 98 de la calle Toledo de Madrid, que cobró la vida a cuatro personas, entre ellas, su amigo y hermano, el padre Rubén Pérez de Ayala.