El jefe de gobierno italiano Mario Draghi aseguró este miércoles que la detención por 24 horas la semana pasada del líder independentista catalán Carles Puigdemont en la isla de Cerdeña fue «una operación policial y judicial que no involucró al gobierno ni a la política». “El gobierno italiano no se ha involucrado en el caso”, respondió Draghi a una pregunta en una rueda de prensa sobre la detención el pasado jueves por la noche de Puigdemont en la ciudad de Alguer, en Cerdeña.
“No tuvimos comunicación alguna con el gobierno español. Había una orden de detención internacional en Interpol emitida por la justicia española”, aclaró Draghi.
Se trató “de una operación de la policía que obedecía a esa orden y su detención. Inmediatamente después se pronunció la magistratura italiana que reveló que sobre la cuestión ya se había pronunciado la justicia de la Unión Europea”, precisó.
“La detención fue suspendida”, recalcó.
El líder independentista y ex presidente catalán fue liberado tras pasar casi 24 horas detenido en una cárcel por el juez, sin medidas cautelares, aunque le citó el 4 de octubre para una audiencia sobre la demanda de extradición presentada por España, a la que dijo que asistirá personalmente.
Se trata de la primera vez que el gobierno italiano se pronuncia oficialmente sobre el asunto.
Puigdemont regresó a Bruselas el lunes, adonde huyó después de la fallida declaración de independencia que lideró en 2017.
España reclama al líder independentista, de 58 años, por sedición y malversación de fondos en relación con el proceso fallido de independencia.
Es la tercera vez que Puigdemont es detenido desde que huyó de España. La primera fue en Bruselas, a su llegada, y la segunda en Alemania, en marzo de 2018, donde los tribunales tardaron casi cuatro meses en devolverle la libertad total.