Dos españoles, un irlandés y un burkinés desaparecieron en un ataque el lunes en Burkina Faso a una patrulla contra la caza furtiva, acompañada de instructores y periodistas occidentales, que dejó además tres personas heridas. La patrulla, integrada por militares, guardabosques, instructores y periodistas occidentales, “fue blanco de un ataque en el área de Fada N’Gourma-Pama”, informó un alto cargo local, quien precisó que “el saldo provisional es de tres personas heridas y cuatro dadas por desaparecidas”.
El ataque fue confirmado por fuentes de seguridad, una de las cuales asegura que los occidentales desaparecidos “son dos españoles y un irlandés, todos ellos periodistas-instructores que trabajan para una oenegé de protección del medio ambiente”.
“Según los supervivientes, dos de ellos [expatriados] resultaron heridos durante el ataque. Se sigue buscando” a los cuatro desaparecidos, añadió esta fuente.
El gobierno español confirmó este martes la desaparición de dos de sus ciudadanos y aseguró que está “en contacto permanente con las autoridades de Burkina Faso” para localizarlos e informa “puntualmente” a las familias.
El ataque fue obra de hombres armados que circulaban en dos camionetas y una decena de motos, según fuentes de seguridad, que precisaron que los atacantes se llevaron armas y material, incluidas dos camionetas y un dron.
Ataques yihadistas frecuentes
En los últimos años se han producido varios secuestros de extranjeros en Burkina Faso.
Una pareja de australianos fue secuestrada en Djibo, en la frontera con Mali y Níger, en la noche del 15 de enero de 2016 durante una acción aparentemente coordinada con atentados en Uagadugú.
Esa noche, los yihadistas abrieron fuego en cafeterías, restaurantes y hoteles de la avenida Kwame-Nkrumah, el centro de la vida nocturna de Uagadugú, con un saldo de 30 muertos y 71 heridos.
Los secuestradores entregaron a la mujer, Jocelyn Elliot, a las autoridades nigerinas aproximadamente un mes después. El hombre sigue desaparecido.
En diciembre de 2018, una pareja ítalo-canadiense desapareció en la carretera entre Bobo-Dioulasso y Uagadugú. Fue liberada en la vecina Mali, después de más de un año de cautiverio.
Desde 2015 los ataques yihadistas son cada vez más frecuentes en Burkina Faso, fronteriza con Malí y Níger.
Al principio los ataques atribuidos a grupos yihadistas -como el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (GSIM) afiliado a Al Qaida y el Estado Islámico en el Gran Sáhara (EIGS) – se centraron en el norte del país, en la frontera con Mali.
Pero, con el tiempo, se extendieron a la capital y a otras regiones, principalmente del este y el noroeste.
Desde 2015, las acciones violentas de los yihadistas causaron más de 1.200 muertos y más de un millón de desplazados.